Cada 3 de diciembre se abre un espacio de reflexión sobre la discapacidad. El Día Internacional de las Personas con Discapacidad fue declarado en 1992 por la Asamblea General de las Naciones Unidas.

El objetivo de estas jornadas es promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad, tanto en el aspecto social como en el desarrollo. Para así concientizar sobre su situación en todos los aspectos de la vida política, social, económica y cultural.

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Mariana Ottonello (MP 4863) es Lic. en Trabajo Social e integra el equipo de salud interdisciplinario de INEBA, de la Unidad de Neurorehabilitación.

Aunque se lograron algunos avances en materia de inclusión con respecto a la discapacidad, Ottonello considera que todavía queda mucho por hacer. “Como sociedad aún seguimos teniendo mucha dificultad para aceptar aquello que se aleja de la ‘norma’, de aceptar la ‘otredad’ y la discapacidad entra en esa realidad”, asegura la profesional.

Es cierto que los cambios llevan tiempo. Ottonello enfatiza en la importancia de trabajar en el día a día para deconstruir representaciones sociales y prejuicios. También destaca la importancia de brindar información y principalmente educar sobre la discapacidad, para lograr cambios verdaderos y profundos.

Pero no es solo un trabajo entre pares, también debe acompañar el Estado y guiar ese camino. Para la Licenciada en Trabajo Social, las normativas acompañan estos procesos de inclusión pero “las políticas públicas muchas veces no son suficientes para garantizar lo que se promueve”.

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Hay que destinar un capítulo aparte para reflexionar sobre la discapacidad vinculada a la problemática de salud mental. “El estigma y el desconocimiento siguen siendo muy grandes”, asegura Ottonello.

Sin dudas, se ha avanzado en el camino de la inclusión, pero todavía queda mucho por hacer para construir una sociedad verdaderamente inclusiva.